El clasificador de estornudos urbanos (Cuento)

La vida del Dr. Mattews estuvo dedicada, durante años, a la investigación. Finalmente, sus observaciones, anotaciones y comparaciones, lo llevaron a lograr su cometido: el clasificador de estornudos urbanos.
Creó después una máquina portátil, liviana y económica, equipada con un sensor de alta potencia para el  sonido del estornudo. En la pantalla se lee con claridad, en letra Arial tamaño 12, el tipo de estornudo hallado. Cuenta asimismo con un anexo para realizar el cuadro estadístico correspondiente.

Esta joya de la electrónica avanzada, responde a la clasificación que el Dr. Mattews realizó como conclusión de sus arduas investigaciones que le otorgaron una sólida experiencia en el tema. La misma comprende las siguientes clases de estornudos:

• Vulgar: es el que resuena con el conocido y simple achís, pero sale sin el obstáculo de una mano interpuesta en su camino.
• Elegante: es el que se esconde detrás de una mano fina y delicada y su sonido parece una suave llamada al silencio (schhhh).
• Confidencial: es el que emite apenas un chiiii casi imperceptible.
• Conciso: es cortito y tímido; deja oír un shch breve y suavecito.
• Ametrallador: también llamado “A repetición”, viene en grupo con al menos tres compañeros que salen uno detrás del otro en forma compulsiva.
• Picante: una vez exteriorizado, deja un ligero picor en la base de la nariz, que necesita ser calmado con un movimiento rápido del dedo índice en la zona afectada.
• Transformista: comienza con un ahhhh prolongado y acompañado por nariz fruncida y ojos entrecerrados y, de pronto, se transforma en un bostezo.
• Frustrado: se escucha varias veces como un ah ah ah ah… pero no llegan a nada. En el sujeto emisor se observa una ligera picazón en la nariz. El frustrado suele convertirse en orgásmico cuando por fin logra salirse con la suya.
• Orgásmico: es el que viene de largos preparativos y finalmente llega al clímax con un atchiiiIIIIIIISSSSS.
• Maldito: generalmente se oye con un achoouus, no está frenados por una mano ni lleva la boca bien cerrada. Esto trae como consecuencia el rociamiento de la o las personas que se encuentran enfrente que expresan o piensan algún improperio dirigido al estornudador.
• Bipolar: es el que suena algunas veces como estornudo y otras veces como tos. Su raro atchós confunde al oyente, que duda si decir “salud” o comentar acerca de la multiplicidad de afecciones del aparato respiratorio en el invierno. Además —para qué negarlo— también puede confundir al clasificador de estornudos urbanos.
• Inoportuno: aquel que hace su aparición en una reunión formal de trabajo, en una filmación en directo, en un escenario o en una primera cita.
• Inoportuno con frenada trágica: se produce cuando el estornudador se resiste a dejarlo salir y cierra la boca con fuerza. Suena como ppphhh y puede ir acompañado por un espantoso moco de diversos colores con salida nasal.

En cuanto le encuentre un posible uso comercial, el Dr. Mattews introducirá su original invento en el mercado internacional. Seguramente, no faltarán compradores curiosos o tal vez compulsivos, que compitan para tener en sus manos esta pequeña e inútil maravilla.
Más adelante, el Dr. Mattews se dedicará a la investigación y codificación de los estornudos rurales, con el claro objetivo de crear un nuevo tipo de clasificador.

Marita von Saltzen