jueves, 27 de marzo de 2014

Los gerundios

El gerundio es un verboide que tiene dos terminaciones: ando y iendo.

  •    Cumple, dentro de la oración, una función adverbial.
Por ejemplo:
    Pasó sonriendo. (Modifica al verbo)

Por eso, no es correcto usarlo como adjetivo.
No está bien decir:
    Escribió una nota dejando saludos.
Se dice:
    Escribió una nota en la que dejaba saludos.

No está bien decir:
    Me entregó una bolsa conteniendo ropa.
Se dice:
    Me entregó una bolsa que contenía ropa.


  •  Debe expresar siempre una acción simultánea o anterior al verbo que modifica.
Por ejemplo:
    Me saludó inclinando la cabeza. (Acción simultánea)
    Caminó rumbo al juzgado, dejándola sola en la casa. (Acción anterior)

No está bien decir:
    Lo defendió la abogada, consiguiendo su libertad condicional.
    Me casé con él, arrepintiéndome al día siguiente.
En estos ejemplos, las acciones indicadas por los gerundios son posteriores a las acciones de los verbos principales.

No es bueno abusar de los gerundios en un texto literario: suelen estar mal usados y provocar cacofonías.

                                                                                                                      Marita von Saltzen

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